Thelma Fardin: "Lo que nos importa es sanar y no ser el verdugo de nadie"
La actriz, que denunció a Juan Darthés por violación, presentó su libro “El arte de no callar”, una autobiografía en la que también le da voz a otras víctimas de abuso.
“Se me recrimina la forma en que expuse mi denuncia. Ven con escepticismo y desconfianza la veracidad de mi relato porque me protegí para contarlo en lugar de simplemente vomitarlo. Porque nunca va a alcanzar. Aunque te expongas hasta los huesos. Sabiendo que me iban a pegar, igual elegí exponerme. Porque era más fácil soportar los golpes de afuera que los goles internos que iba a darme si me quedaba de brazos cruzados”.
Ese fragmento pertenece al libro “El arte de callar. Autobiografía entre el silencio y la impunidad”, de Thelma Fardin, que se presentó en la Feria Internacional del Libro a sala llena. El nombre de la actriz se convirtió en un símbolo de la lucha de las mujeres, a partir de su denuncia al actor Juan Darthés por violación durante la gira latinoamericana del programa “Patito Feo” en 2009.
La sala Tulio Halperin Donghi fue el escenario del lanzamiento de un libro que, además de contar su historia en primera persona, le da voz a otras mujeres víctimas de abusos sexuales, con estadísticas y la palabra de especialistas. A partir del 11 de diciembre -fecha en la que Fardin hizo su denuncia con el colectivo Mujeres Argentinas-, las denuncias aumentaron 1200%.
Fardin estuvo acompañada por el filósofo Darío Sztajnszrajber, las periodistas Ingrid Beck y Luciana Peker, y la fundadora de la Red por la Infancia, Paula Wachter.
“La palabra y el acto de hablar siguen siendo la manera. Aunque moleste, todavía tenemos mucho para decir. Muchas veces sentí que tenía mucho más para decir y que no estaban los espacios construidos para hacerlo. La verdad es que recién estamos empezando a hablar y cada vez hay más oídos dispuestos a escuchar.
Todavía estamos en construcción y estamos pagando costos muy altos por romper con la forma en la que nos dijeron que teníamos que movernos”, manifestó la actriz, que contó que recibió mensajes violentos en las horas previas a la presentación.
La integrante del Colectivo de Actrices Argentinas estuvo acompañada, también, por algunas de sus compañeras, como Anabel Cherubito y Mirta Busnelli, entre otras. Fardin destacó la importancia de “movernos en red”. “Es la red que me permite caer, levantarme y salir a hacer esta locura. Fue un nivel de exposición muy grande. Lo que nos importa es sanar y no ser el verdugo de nadie. La idea no es cortar la cabeza de nadie. La Justicia no es un lugar justo", aseveró.
Mientras tanto, sobre el libro, consideró que es "sólo una herramienta para las personas que sufrieron". "También está dirigido a los que acompañan porque saben cuán caros son los costos que pagamos y cuántas cosas quedan expuestas. La palabra sigue siendo la manera. Tenemos que hacer de la experiencia individual una lucha colectiva”, afirmó.
A su turno, Beck dijo que “el libro se llama ‘El arte de no callar’ pero bien podría llamarse el arte de hablar, porque hay una decisión de escribir como catarsis y reparación, pero también como un acto político y revolucionario”.
Por su parte, Sztajnszrajber, ex compañero de trabajo y amigo de Fardin, recordó la conversación que tuvieron cuando ella le contó su decisión de hablar. “Le dije: ‘¿Vos sabés lo que va a pasar? Esto va a explotar en serio. Ella me miró desde su fragilidad y me dijo: ‘Me la banco porque no lo hago por mí. Lo hago porque siento que es un punto de inflexión en algo que marca un cambio’”.
Peker, una de las militantes feministas que acompañó todo el proceso de denuncia, habló de las falencias del Estado en la protección a las víctimas. “Faltan políticas públicas que respalden a quien quiera denunciar. Faltan querellantes abogadas y faltan psicólogas. Esta es una revolución de la libertad”, dijo la autora del libro “Putita golosa”.